CENTRO BUDISTA ZEN SOTO.PR
Quienes somos
Somos una comunidad diversa en la que participan mujeres y hombres, personas asalariadas y jubiladas, jóvenes y menos jóvenes. Todas las personas que participamos estamos interesadas en poder vivir una vida más tranquila, entendiendo y manejando las dificultades que nos presenta la vida cotidiana. Aspiramos a la reducción de la insatisfacción y al fortalecimiento de la compasión, la generosidad y la paciencia. Estudiamos las enseñanzas budistas confiando que en ellas podemos encontrar la forma de entender la realidad tal cual es y no como pensamos que es. De esta manera esperamos poder responder a cada momento desde nuestro mejor ser, para beneficio nuestro y de las personas con las que interactuamos. Nuestra aspiración es beneficiar a todos los seres.
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Somos una comunidad laica ya que no contamos con una persona residente que sea ordenada como monja o monje o que haya recibido la transmisión en un linaje del Budismo Zen. Nuestra maestra laica, Sai Ho Sandra Laureano, inició su práctica en el Budismo Zen Soto con Tokudo Jion Susan Postal en 1996 en Nueva York. Bajo su supervisión y recomendación fundó el Grupo Zen Cupey en abril 2008. En el 2018 recibió la Encomienda Laica de su maestra actual Ninzan Kyosho Valorie Beer. Esta encomienda le reconoce su capacidad para ejercer como maestra laica, mantener un centro y servir de guía y acompañante a estudiantes interesados en conocer el Budismo Zen Soto. Durante este mismo año y en respuesta a esta encomienda, el Grupo Zen Cupey pasó a ser Centro Budista Zen Soto.PR.
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Durante los últimos años, seis estudiantes han decidido tomar los preceptos (ver sección de enseñanzas para conocer más sobre los Preceptos) como guías para sus vidas en una ceremonia que se conoce como Jukai. Actualmente son recursos para otros estudiantes, comparten reflexiones, liderean discusiones sobre textos y son guías para personas interesadas en lo que hacemos.
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Política de inclusión
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Nuestra comunidad cree en la capacidad de todos los seres de llegar a entender la realidad tal cual es y, con ese entendimiento, desarrollar su sabiduría y compasión. Por esto invitamos a personas de todas las prácticas espirituales y no discriminamos por ninguna razón. Entendemos que la diversidad de personas de todas las prácticas espirituales, razas, nacionalidades, clases sociales, género, orientación sexual, edad y habilidades físicas, visiones políticas o cualquiera otra distinción de la diversidad humana, sirven para enriquecer nuestra práctica. Tan comprometidas estamos con la no discriminación que la misma forma parte de nuestros estatutos de incorporación.
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Incorporación
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Somos una organización que toma decisiones de forma horizontal y la misma está incorporada y registrada, tanto en el Departamento de Estado como en el Departamento de Hacienda del Gobierno de Puerto Rico, como una organización sin fines de lucro. A modo de cumplir con los requisitos de tal clasificación tenemos una Junta Directiva. Es nuestro interés de crear un ambiente donde se valore cada ser humano como un posible Bodhisattva (una persona que se ha comprometido a seguir este camino para el beneficio de todos los seres), permitiendo su participación plena en el desarrollo del Centro. Todas las personas que compongan la sangha y estén interesadas en participar en la determinación de la planificación de las actividades y enseñanzas, así como en la toma de decisiones relacionadas al funcionamiento del Centro, pueden ser participantes de la Junta Directiva del Centro. Además, todas nuestras enseñanzas y actividades son libre de costo. El centro se mantiene a base de donativos voluntarios de los estudiantes y personas que valoran las prácticas que realizamos.
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Membresía
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La participación en la comunidad varía dependiendo del nivel de compromiso que asume el o la estudiante. Son sangha (comunidad) plena las personas que asistan con regularidad y consistentemente a las enseñanzas y prácticas celebradas en el Centro, incluyendo las prácticas semanales de meditación, el retiro mensual y los cursos de aprendizaje. Además, apoyarán con las tareas del mantenimiento del espacio. Son sangha de apoyo las personas que asistan periódicamente, pero de forma consistente, a las enseñanzas y prácticas celebradas en el Centro, incluyendo las prácticas semanales de meditación, el retiro mensual y los cursos de aprendizaje. Además, podrán apoyar con las tareas del mantenimiento del espacio, si así lo desean. Son sangha voluntaria las personas que ayudan con actividades especiales y particulares, y ofrecen destrezas particulares para lograr las metas de las actividades del Centro.